Hoy Estrada defiende su título frente al filipino Richie Mepranum, y si en un principio lo relacioné a él y el box con el ridículo, me ha callado la boca su record de 25 – 2. Despachó en su carrera a la leyenda viviente Brian Viloria, y al invicto Milan Melindo.
Juan Francisco se dispone a entrenar como todas las mañanas del mundo. Allá va rumbo al gimnasio cruzando calles, atajando el tiempo entre los puños. Su mente está encaminada en la victoria, y darle a Sonora un campeón de boxeo más.
Lindo el paisaje que se presenta ante sus ojos, automóviles estacionados en lo que siempre estará en su memoria: su barrio. Y de pronto como salido de un cuento infernal dantesco, un gallo aparece frente a sus ojos. Sí señores, un gallo, un animal, un ave ahí de pluma negra y amarilla, de hueso se abalanza sobre el boxeador, quien no puede salir bien librado y recibe una serie de picotazos en la pierna.
Esa noche, Juan Francisco pasa un mal rato en cama sin poder dormir, y de pronto, como el regreso de un cuento infernal dantesco, el hombre se convierte en una especie de Hombre Gallo, con todo y cresta. Lo que sigue de la historia es puro box.
Lo anterior es un burdo retrato de la primera vez que escuché hablar de Juan Francisco “Gallito” Estrada, hoy a sus 23 años el flamante Campeón Mundial Mosca AMB y OMB. Y lo que relaté al principio es parte del promocional de Box Azteca y su programa campeonato llamado Campeón Azteca, de donde Estrada emergió como finalista y ganador del cetro. Así como se lee, los de la televisora grabaron un video promocional con Estrada como actor principal. En imágenes se contaba la historia del Gallito, quien en una de esas mañanas de entrenamiento, se topó frente a un gallo mágico o algo por el estilo, que al contactarlo severamente con su pico en piernas y manos, le transmitió un don, o enfermedad trágica, y con esto la posibilidad de adquirir durante sus peleas la gallardía del patrón del gallinero, con todo y cresta (la cresta aparecía en la pantalla bien adherida al cráneo del púgil).
Hoy Estrada defiende su título frente al filipino Richie Mepranum, y si en un principio lo relacioné a él y el box con el ridículo, me ha callado la boca su record de 25 – 2. Despachó en su carrera a la leyenda viviente Brian Viloria, y al invicto Milan Melindo. Así que estrechemos nuestras manos, abramos los ojos, seduzcamos a la noche sobreviviendo al hastío y pasemos una copiosa noche de box frente al mejor peso mosca del mundo, y es mexicano. Que viva el norte
El round nuestro de cada día 